Capítulo 35.
Parando el reloj.
Una vez más la Luna volvió a brillar
encima del castillo Vampyrus, la chispa de los inmortales se avivó
igual que siempre y, la fúnebre y triste canción, de nuevo sonó.
Los
cuatro llevaban tiempo buscando algo que les de una pista hacia dónde
ir, pero nada aparecía.
-Documentos
del 98 -leía Joe mientras pasaba las hojas de la carpeta- parece
que no encontraremos nada.
Entre
tanto silencio, el tiempo pasaba y en medio de la desesperación se
escuchó -¡ajá!- con euforia.
-¿Qué
tienes Joe? -preguntó Luca.
-Me
parece haber encontrado un documento que nos ayudará.
-Entonces,
¿a qué esperas? -dijo Grace sarcásticamente.
-El
documento dice: 14 de marzo de 1998, acto seguido procedemos a
cambiar el apellido de Luca Savarese a Luca Salvatore, conforme a
situaciones de protección bajo la autorización del padre, Emiliano
Salvatore.
-Fotocopia
el documento -dijo Josh- y vayámonos, en cualquier momento puede
aparecer alguien.
Mientras
Joe fotocopiaba el documento, los otros dejaban todo como lo
encontraron para reducir la presencia de ellos en ese lugar. Salieron
sin que nadie los viera y se dirigieron de nuevo al punto de partida.
-¿Qué
te pasa? -preguntó Grace a Luca- ¿En qué piensas?
-¿Nunca
has pensado en parar el reloj? -respondió Luca mirando el cielo.
-¿Parar
el reloj? Algo así como parar el tiempo, ¿a eso te refieres?
-Sí
… quisiera detener el tiempo para no saber nada más sobre mi
pasado y olvidarlo todo.
-No
eres el único que quiere olvidar, pero lamentablemente no se puede,
es como nosotros, podemos detener nuestro crecimiento y quedarnos
jóvenes eternamente, pero aún así, los años corren y los tiempos
cambian.
-Quisiera
no recordar nada hasta ahora y volver a empezar, volver a tener un
pasado, un presente y un futuro sin secretos.
-Te
entiendo, muchas veces he deseado no ser esto, pero después pienso y
me resigno. No lo pedimos, simplemente nos tocó.
Terminaron
la conversación con un fuerte abrazo amistoso y luego, cada uno se
fue.
Grace
pensativa, sentada en la ventana de su habitación, no podía olvidar
la conversación con Luca: -Quisiera no recordar nada hasta ahora y
volver a empezar, volver a tener un pasado, un presente y un futuro
sin secretos-. Esas palabras se repetían en su mente una y otra vez,
hasta que por fin lo entendió, olvidar, pasado, el cambio de
apellido, la fotografía, Internet, la conclusión de todo, era la
magia negra.
